La visita revisó avances en el cumplimiento de exigencias legales y prioridades tras la aprobación de la nueva RCA.

En el marco del pilar de liderazgo del Modelo de Gestión Ambiental, Minera Zaldívar recibió la visita de representantes de la gerencia corporativa de Medio Ambiente de Antofagasta Minerals. La comitiva desarrolló una jornada de acompañamiento para revisar y evaluar en terreno al gabinete, la implementación, avances, identificar oportunidades de mejora y alinear el trabajo con los objetivos estratégicos de la organización.

El superintendente de Medio Ambiente de la Compañía, Carlos Pérez, destacó la instancia. “Nos ayuda a entender hacia dónde canalizar los objetivos del modelo. Muchas veces nos perdemos en el bosque y este acompañamiento nos da una visión desde afuera de lo que debemos fortalecer y donde dar continuidad”.

Focos y gestión

Tras la aprobación de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) que extiende la vida útil de la operación hasta 2051, el equipo definió tres focos prioritarios: la gestión del SIAM (línea de agua), las acciones en Mina y área de Negrillar que involucra el trabajo de relacionamiento comunitario.

El área Mina avanza en el fortalecimiento de la barrera hidráulica y en el sellado de pozos, mientras que los equipos detrás del SIAM trabajan de manera coordinada con distintas gerencias y el corporativo para asegurar avances sostenidos. En paralelo, el diálogo con comunidades ha sido clave para cumplir compromisos ambientales y proyectar un trabajo conjunto.

La subgerente de Gestión Ambiental Corporativa de Antofagasta Minerals, Gualda Flores, explicó los alcances del análisis de gabinete y en terreno. “Evaluamos los avances de la nueva RCA, los controles de polvo en planta, el proyecto de las piscinas de solución y el monitoreo de la barrera hidráulica. También identificamos oportunidades para retomar el proyecto de reparación de piscinas, verificar la eficiencia del control de polvo y definir la continuidad de cubiertas en correas traspasables”.

Finalmente, la especialista en Permisos de Desarrollo, Débora Gomberoff, afirmó que este acompañamiento, además de una revisión técnica, “es un espacio para anticipar desafíos y garantizar que nuestras decisiones de hoy nos permitan operar de manera responsable en las próximas décadas. Nos permite mantener el foco, priorizar acciones y asegurar recursos para las iniciativas más urgentes”.